Hoy Emiliano me levantó a las 9 gritando "está dormida", siguió comentando que bajé del avión rojo y me trajo dando vueltas por todos lados para ver su dvd de "quiquí" y el libro de animales que le traje.
Comimos con Zora y Alberto, el primo de Martín, en Archie´s, donde vimos que México anotó tres goles y unos señores nos desearon suerte antes de irse. Regresamos a la casa y Emiliano se comió con mucho trabajo su sopa. Luego me dormí unas dos horas.
A las 9 salimos a cenar. Nos comimos unas hamburguesas y de regreso mi sis me pidió que llevara a Emiliano en los brazos porque no le gusta ir en la silla. Pues en cuanto cerramos las puertas Emiliano dijo: "silla, silla". Le dije que no, que iba conmigo. Le valió y como no le hice caso se puso a llorar como loco. La mamá volteó con cara de susto "¿por qué llora así?", le expliqué y me ordenó que lo pusiera en la silla. Lo puse pero le dije: "estamos entrados, morro, bien entrados tú y yo". En la casa Brenda me mandó a que me sentara: "Emiliano, te vas a sentar con tu tía y te vas a tomar tu leche ahí con ella".
"Abaza mamá" "¿por qué no quiere estar contigo?" "porque no soy su madre" "tiene mamitis" "está muy chiqueado ese chamaco" "EMILIANO, TE VAS A TOMAR LA LECHE CON TU TÍA" "¿viste? a su papá sí le hace caso" "consentidora" "sí" "abaza mamá, no quiere tí kala" "¿por qué no quieres a tu tía Karla?" "ah, bueno ya me voy" "pobrecita tu tía" (salgo, todo está oscuro, de veras me dan ganas de llorar, estoy menstrual, supongo; Emiliano sale con los brazos extendidos) "ocita tí kala" "¿qué pasó? ¿quieres los animalitos? los dejamos abajo" (se va conmigo al cuarto, no lo abrazo, se queda viéndome) "dijo algo de un osito" "dijo poecita" (lo levanto) "baza mamá" "chiqueado" "buenas noches" (besitos, la la la).
Quiero ver la tele y despierto a Emiliano. Se duerme. Brenda sale al rato, no puede dormir. Me platica de la Casa Mexicana, que mañana tiene una cita con el gerente del Banco de la República y que ellos promueven asuntos culturales, que esto, que lo otro. Dice que está cansada, que hay proyectos de construcción, que el café, que la galería, que el auditorio. Se calla y va a ver a Emiliano. "Ya me vo ya dormir, si oye mi voz no se duerme".
Ah, los hijos. No podría dejar todo así.
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